El sismo de magnitud 7.1 ocurrido la noche del martes dejó estragos en los estados de México (donde más de 200 mil habitantes se quedaron sin agua potable por averías en infraestructura), Michoacán, Morelos y especialmente en Acapulco, Guerrero, donde hay 600 viviendas, comercios y oficinas dañados en las colonias Progreso, Coloso, Real Hacienda, Infonavit Alta Progreso, Hermenegildo Galeana, Vicente Guerrero 200, Las Playas y Pedregal de Cantaluna.
El Servicio Sismológico Nacional informó que hasta las 17 horas de ayer se habían registrado 259 réplicas del movimiento telúrico, la más grande de magnitud 5.2.
El servicio de agua potable se suspendió en Acapulco debido a daños en una subestación de la Comisión Federal de Electricidad que suministra energía a los sistemas de captación Papagayo 1 y 2.
La alcaldesa, Adela Román Ocampo, informó que en el municipio se reportaron siete derrumbes en avenidas y carreteras, tres bardas colapsadas, así como 19 fugas de gas en casas y hoteles. El Aeropuerto Internacional de Acapulco suspendió operaciones, con excepción de las aeronaves privadas.